dc.description.abstract | En el año 1700, en la ciudad de Módena, Bernardino Ramazzini (1633-1714) publica la primera edición de su De Morbis Artificum Diatriba, la pionera obra que va a significar el inicio de la Medicina del Trabajo. En ese mismo año, que marca el límite del siglo XVII, Ramazzini va a cambiar su residencia de Módena a Padua, al ser contratado como profesor de Práctica Médica en la Universidad paduana. Una fecha que, además, para algunos autores marca el fin del Barroco y el comienzo de la Ilustración y, de ahí, que podamos afirmar que la época que, al autor nacido en Carpi le tocó vivir, estuviera entre estos dos periodos históricos. Sin embargo, resulta imposible señalar con precisión los límites de los diferentes períodos históricos, máxime cuando su vigencia no coincide para todas las disciplinas (artísticas, literarias, científicas, etc.) y, más aún todavía, cuando el término se traspasa de unas a otras, como ocurre con las palabras “barroco” e “ilustración”. Laín Entralgo y López Piñero apuntaron como posible origen de la primera el vocablo “barrueco” con el que se nombran en español, y en portugués, las perlas irregulares. La palabra pasó, sucesivamente, de significar un estilo arquitectónico particular, a un estilo estético general, para más tarde generalizarse a la época histórica subsiguiente al Renacimiento. Por su parte, el origen de la palabra “ilustración” lo sitúan en el famoso ensayo de Kant de 1784 ¿Qué es la ilustración?, donde el filósofo prusiano argumenta que significa el abandono por parte del hombre de una minoría de edad cuyo responsable era él mismo. Esta minoría significa la incapacidad para servirse de su entendimiento sin verse guiado por algún otro. | es_ES |